16 de julio de 2011

Isla de la Realidad.

Conversaba con un librero amigo sobre Cuba, le contaba mi deseo turístico-antropológico de visitar la isla antes de los cambios o de un giro notorio. Me hablaba de los cambios que se han venido dando desde el interior del régimen, lo decía con conocimiento ya que viaja constantemente a la isla. Me hablaba de apertura, cuentapropismo, una suerte de arrendamiento de la propiedad publica de un local para de ello obtener limitadas ganancias privadas. Me sugería libertad de expresión, disidencia activa y otros etcéteras. Solo topamos en la inexistencia de un sistema político representativo, esto es con múltiples partidos. También diferimos respecto a los medios de comunicación, claramente no diversos y menos todavía receptores de las diferencias y los variados puntos de vista. Durante la conversación pude conceder el valor propio de los avances en salud y educación; solo matizar que la educación a todo nivel para ser funcional y útil requiere de una mirada afín al régimen imperante.
No parece algo fácil observar desde afuera, tampoco es muy difícil juzgar una realidad desde los mínimos necesarios para una sana convivencia social. El morbo a ratos me invade, me detiene el saber que Cuba es mas que un laboratorio social, es mas que el icono de la democracia marxista latinoamericana, es mas que las instituciones imperantes. Es también su gente, los que están y los que han partido. Los de la isla y los del exilio, Cuba son sus logros y sus desaciertos…en ello me detengo, si…en el no relato, en lo que no ha ocurrido, en la reconciliación, en el consenso social necesario, en la democracia acordada, en la autodeterminación de personas y pueblos…en esa historia por escribir, en esa foto de familia por tomar, en ese nuevo caminar…
Los dejo en compañia de la trova disidente de Carlos Varela.


Sentida versión del tema Guillermo Tell,símbolo de exiliados y disidentes...canto de una ballesta de cambio, tras un nuevo destino común y en paz. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario